miércoles, 30 de diciembre de 2009

Un Buen Comienzo, Part III

Antes de comenzar, ¿se acuerdan de mi entrada a cerca de la saga Twilight? Citaré textual un comentario que apareció hace poco:
eres un perfecto idiota ok crepusculo es lo mejor del planeta ok torpe tu jamas aras un libro por k nadien nunca te lo publicara.
Estimada anónima (parece ser mujer), primero te agradezco el post. Segundo, como se dice en buen chileno..."te cagaste sola", aprende a escribir (y...leer mejores libros) y luego vuelve con un argumento decente. Tercero, ¿qué tiene que ver publicar un libro con ser buen escritor? Cuarto, lo mejor del planeta es nuestra gravedad de 9,78 m/seg² (o algo así). Quinto, no es lo mismo hacer un libro que publicarlo. Sexto...feliz navidad atrasada.

Ahora sí, este será el último post del año. Y tuve en mente hacer este en particular desde que creé el blog, pero las circunstancias lo fueron postponiendo, y es hora. Verán, durante el transcurso de mi vida (o mejor dicho, de lo descargado desde Internet o pasado en tiendas de discos) me he topado con discos malos, como el The Best Damn Thing de Avril, discos decentes como el Lights and Sounds de Yellowcard, discos buenos como el Americana de The Offspring, discos excelentes como el El Amor es una Trampa Mortal de Casanova...y éste. Decir que fue amor a primera vista/oída habrá sido poco; qué clase de historia, qué estudio antropólogico, la existencia del ser humano se puede resumir en este trabajo (y el Dark Side Of The Moon, para qué venir con cosas...). De una duración poco superior a la hora y quince, va desde canciones en que quieres abrazar al ser humano más cercano a ti y pedirle perdón por las infinidades de veces en que no le has demostrado cuanto lo aprecias, u otras tonadas en que te provoca agarrar un cuchillo y abrirte las tripas, justo cuando el disco mismo pareciese decirte "hey, al menos espera a que acabe". Temas que te pueden dejar una sensación de total paz interior, y otros que te provocan exteriorizar todo lo que sientes y sentir lo que aun no has podido. No, este no es un simple CD, es una recopilación de las 6.500.000.000 voces que tienen algo que decir en este planeta. Estimados lectores, me es un honor hablarles de una pieza musical que curiosamente...no tiene nombre, este es...( ). **Nota: si están leyendo esto en voz alta, pueden referirsele como parentesis, brackets, sin título, svigaplatan, o como quieran...**
Pero antes de, a modo de bautizo, les sugiero oír (y si pueden...ver) el siguiente video (realizado por la misma banda); si es posible...con las luces apagadas, pantalla completa y un buen bebestible cerca tuyo, una vez hecho...prosiga con su lectura.
A lo lejos, se siente que alguien hace click, y un leve y suave teclado in crescendo se acercará a ti. Te acurruca, da abrigo y te borra todo mal pasado. Vaka, es el nombre con el que suele llamar este tema, en honor a la hija del baterista de la banda, Orri Páll Dýrason. El sonido se prolonga por más de dos minutos en que ocasionalmente una voz gesticula una extraña onomatopeya. Ya para los 2.20 la voz difusa adquire forma, un tranquilo arruyo que se convierte en otro instrumento más; un verso instranscribible acompaña amablemente al piano y sus notas. Cuando nos acercamos a los 4 minutos, más y más sonidos se unen a la marcha que serviría perfectamente para dormir a un niño, marcha nupcial, fúnebre o un himno nacional. En un momento parece que se deja solo al tímido piano que continúa en su lánguida y pacífica sonata, cuando el resto de la banda vuelve recargado, en un tono aun más reconfortante e iluminado, si el amanecer tuviese banda sonora, sería esta canción, un pequeño hilo brillante que se asoma por el horizonte y que en poco más de 6 minutos se transforma en una luz incandescente capaz de dar abrigo hasta el más sombrío y gélido rincón de la tundra que a veces somos.

( ), es el tercer álbum de la banda islandesa llamada Sigur Rós, un cuarteto con una cantidad de ideas y dotes musicales que pocas veces se puede apreciar en un ser humano, y posiblemente una vez cada 1000 años los planetas se alinean permitiendo que cuatro mentes con tantas cualidades trabajen juntas. Hecho el 2003, el disco físicamente ya rompe esquemas. La portada y contraportada no son más que impresiones de ramas y hojas sobre papel diamante. El álbum es protegido por una cubierta plástica blanca, la cual tiene unos agujeros en el centro simulando dos parentésis, trasluciendo la vegetación del fondo creando el efecto visual que ven en la portada algo más arriba. Debajo de los parentesis, dice tímidamente Sígur Rós, y en la contratapa de este plástico, la impresión de un niño caminando dormido. El álbum fue lanzado cuatro veces: una para Europa, para Japón, US y Australia, cada una con un grabado distinto en el papel diamante, quizá sea mi modo simplón de ver la vida, pero para mí las cuatro se ven casi totalmente idénticas. La versión vinilo tiene en su parte trasera el mismo niño sonámbulo, por delante los mismos paréntesis, pero éstos transparentan los discos negros de su interior.

Ninguno de los temas de este trabajo posee nombre oficial, así que se les conoce como Sin Título #1, #2, etc...o por sus apodos dados por la banda o el medio. Con eso, pasamos a Fyrsta [español: La Primera], un ruido electrónico y la voz inconfundible de Jón (Jónsi) Birgisson (el vocalista) dan paso a los primeros sonidos de batería del disco, la melodía es algo más densa, como si fuese cubierta por una cruda niebla que sólo deja pasar el golpe de las baquetas y a lo lejos una pared de sonido creada por un teclado, un metalófono y ese ruido electrónico. Hacia los dos minutos, los versos sin traducción de Jónsi pareciesen querer despejar la niebla y entablar un diálogo con una batería en trance, una niebla circundante o con un público inexistente. A medida que la canción acepta a esta bruma como otro instrumento más, unas notas agudas a lo lejos (¿o es una voz? parece que se hacen sinónimos) se diluyen entre una percusión algo más viva, y un Jónsi algo más agitado. En poco tiempo, esta niebla engulle a la banda y las notas se convierten en un lúgubre pero extrañamente cálido ser que avanza lentamente, ¿hacia dónde? hacia el mismo lugar que el resto de nosotros: no tenemos idea.
Cuando Fyrsta ya no es más que una vela que está a punto de consumir toda su cera, hace su entrada "La Unión" Samskeyti, un instrumental de poco más de seis minutos (aunque existe una versión hogareña [la del video] algo más corta) que similar a Fyrsta, es un diálogo entre sonidos distintos. Un piano totalmente en trance sigue una eternamente idéntica partitura de pocas notas, mientras el sonido a su alrededor lo eleva cada vez más. Velonchelo, metalófono, guitarra acústica, entre otros. En unión agarran a este piano y en conjunto van en su in crescendo hasta un fin que es todo menos claro, casi al final del tema nuestro testarudo piano parece haber entendido el mensaje de sus circundantes y en su clímax lograron revivir la llama que se venía menguando hace pocos instantes ¿será alguna metáfora? Cuando pareciera que se llegó a un común acuerdo en este diálogo, una de las canciones más bellas (y créanme, no es un adjetivo que suela usar) de Sigur...cesa. ¿Significa que terminó? Muy probablemente...no.

Una de las cosas que distingue a ( ) de otros trabajos de la banda islandesa, además de cómo es físicamente el cd, son sus propias canciones. Jónsi ha demostrado su genialidad al convertir el islandés, un idioma que al principio puede sonar bastante agreste u hostil (si quieren comprobarlo, pueden ver [ni siquiera leer, sólo ver] esta página), en un lenguaje que se entiende no por el oído o las letras, si no por el estado de ánimo, haciendo que las canciones de Sigur Rós se comprendan aun si (como yo) no tienes la más puta idea de islandés. Llevando esto un paso más allá, desde el primer disco de la banda (Von) que se viene cantando, además del idioma nativo, un lenguaje inventado, sin traducción, que según palabras de Jónsi es simplemente lo que él siente que debería decirse en ese momento. Este pseudo-lenguaje, llamado Vonleska (en honor al disco en que primero se usó) fue usado en un par de temas de álbumes previos al ( ), junto a otros temas cantados en islandés; pero para ( ), junto a la nula información del álbum que el CD trae, a que ningún tema tiene alguna identificación, el disco en su totalidad es cantado en este idioma, así, estas canciones carecen totalmente de letra. Si se escucha con atención, se puede notar incluso como durante momentos separados por 20 o más minutos de diferencia, en canciones distintas, Jónsi repite los mismos versos una y otra vez, en distinto tono y con distinta instrumentalización. ¿Notable? Sí. Que un idioma que ni siquiera existe tenga tanto que decir.

A veces oída por mí como un "Vaka II", llega la "Canción de la Nada", Njósnavélin, si es que Vaka narraba los tímidos ascensos del astro rey, Njósnavélin narrará el paso de éste por las nubes que suelen taparlo a esas tempranas horas de la mañana. Una rara mezcla puede parecer tocar una guitarra con un arco (la varilla usada en chelos y violines), pero este peculiar sonido es uno de los característicos de Sigur, y esta canción en particular. Este tema irradia una curiosa paz, una sensación de sobrecogimiento, el ver caer las hojas en otoño o la tranquilidad de orinar en el río vírgen de algún bosque. Será esa calma que acontece cuando se va la luz a eso de las 11 pm y no te queda otra más que mirar hacia arriba y ver el espectáculo abrumador que silenciosamente está allí cada noche. Un efímero pero potente momento de polifonía, probablemente el tema con mayor cantidad de notas hasta ahora; los instrumentos finalmente están de acuerdo, ahora hacen su magia...crear un ambiente, ¿de qué? De esos que están bien dentro de la médula. Y la voz de Jónsi se encargará de excarvar hasta ella, para cuando lo logra...nos quedamos igual que el cielo nocturno al irse la luz, igual que cuando comienzan a echarnos tierra una vez que nos metieron en un baúl de madera, igual que cuando estás a punto de dormir: total y absoluto silencio.
35 segundos de perfecto y quizá angustiante silencio, una pausa de ( ) que separa los 4 primeros temas del disco del próximo cuarteto, la pausa que separa al parentésis izquierdo del derecho, la que separa los temas cálidos, acurrucadores y "redondos", sin nada agudo para dañar; en cuatro temas más fríos, melancólicos, quizá agrestes, ...pero tengan por seguro que igualmente potentes. Jónsi, Georg, Kjartan y Orri se encargaron de abrigar tu alma en estos cuatro temas. Ahora, la desgarrarán.
Estos 35 segundos, sumados a los primeros 5 de Álafoss, te hacen notar que estás en un lugar totalmente distinto. ¿Son los mismos instrumentos que te cobijaron hace poco menos de un minuto? Sí. No es una intimidad, es un espacio abierto gigante, inóspito y totalmente desierto. Álafoss es el lugar de grabación del ( ), y si es que les inspiró a crear este tema...tengo que ir allá algún día. Un murmullo de chelo que dura poco más de un minuto, es ayudado por una agonizante percusión, y hacia los dos minutos la voz de Jónsi llega débil, no por cansancio, si no por la soledad de este páramo. Sonidos que vienen desde lejos, pasan cerca tuyo y luego se perderán en el horizonte, es sencillo extraviarse en este tema, y aunque no estés en una habitación oscura y desconocida, serás llevado ahí, y luego de una rápida búsqueda del interruptor, te rindes y comienzas a vagar en la oscuridad, intentas seguir la voz pero esta viene de todos y ningún lugar. Desolado. Álafoss está totalmente desolado. La soledad parece sentarte bien, y tu sombra (gigante en lugar tan oscuro) se convirtió en tu compañera, pero fuiste engañado. Hacia los 8 minutos, tu infinita sombra se une a los pocos instrumentos presentes y te da un clímax que puede llegar a la desesperación. ¿Intentarás huir? Hacia donde corras no habrá nada más que tinieblas, y una batería golpeando al son de tus pasos, te detendrás luego de minuto y medio...y así lo hace también esta canción.

Desnudo y expuesto a lo que vendrá (como siempre hemos estado) aparece el siguiente tema. Una batería algo más viva es tu bienvenida. ¿Un ritual ancestral? Quizá. E-Bow (llamada así por el instrumento con que Georg Holm toca su bajo en este tema) pareciera querer narrarte la oscuridad que te envuelve, miras hacia todos lados y leves líneas te muestran que hay algo de luz a tu alrededor, no todo estaba perdido. Poco antes de los dos minutos, una voz de amargura aparece de entre los instrumentos que parecían ignorarte. Te intenta mostrar el lugar abandonado sobre el que te encuentras, parece un bosque nevado, poco antes del atardecer; parece el momento previo a una ejecución, o simplemente...algún estado mental. Vagas sobre estas notas tratando de buscar algo conocido, pero no hayas nada...al llegar los 6.40 minutos, tropiezas y al levantar la vista te topas con una pared de sonido creada por los instrumentos de esta penumbra, antes de que te intentases incorporar, ya fuiste levantado y llevado por esta pared, ahora convertida en marea, hacia quién sabe dónde. Te diré hacia donde. Hacia la misma muerte.

Sobreviviste a tus miedos, a tus angustias y a un terreno hostil, estás listo para dialogar con "La Canción de la Muerte", Dauðalagið [Nota: El link está separado en 2 partes]. Cabe mencionar algo: esta ha sido hasta ahora, la única canción que he oído en mi vida, que me ha dado frío de sólo oírla. Ahora sí, estás totalmente solo. Un sonido similar al de tu corazón luego de haberse detenido se escucha por más de un minuto, hasta que las cuerdas y la batería le dan la bienvenida a nuestra eterna compañera. ¿Quién está más muerto? ¿Yo o ella? Jónsi con una voz de ultratumba tampoco tiene la respuesta. No, aún te queda algo de vida, la voz pareciera decir... y eso no le agrada. Su rabia se materializa a los 4 minutos iluminando todo a tu alrededor junto a una pared de sonido, no era una luz cálida, era la fría luz de la muerte. Jónsi se calma y continúa hablandote. ¿Qué te dice? ¿Te instará a morir o a vivir? Se acerca a ti y a los 6 minutos y fracción comienza a gritar nuevamente. Parece que no quiere dejarte vivir. Con unos platillos cuyo sonido parece extraer tus fuerzas vitales, la voz inicia un melancólico y fúnebre diálogo contigo. Luego de 10 minutos en que estás estupefacto ante ella, te da con todas sus fuerzas, y no tiene intenciones de rendirse. Pasaron tres minutos y lo único que queda son los versos sin traducción de Jónsi, hasta él mismo...padeció.

Todo ha muerto, salvo la música, y ésta está preparada para darte el máximo clímax. Sín Título #8: Popplagið ("La Canción Pop") es el último tema de ( ), y posiblemente el más intenso. Unos acordes de guitarra, junto al sonido producido por el arco de chelo, luego la batería se les une, y la canción comienza. Parecen querer rescatarte de tu diálogo con la muerte, y la voz de Jónsi, acompañada con singular vigor por la batería de Orri, no está ni alegre ni triste, está simplemente. Ha pasado la primera estrofa y un coro relativamente normales (salvo porque no dicen nada...), La Canción Pop tiene una extraña (pero no alegre) calma, la 2ª estrofa repite a la 1ª, curioso bis. El 2º coro parece ser cantado por un Jónsi igualmente ausente...cuando algo ocurre. De aquí hasta el final de la canción, no será más que una catársis en que todos y cada uno de los instrumentos más la voz de Jónsi crean no una pared...sino una explosión de sonido. Y sencillamente, no hay nada más que decir....

Un disco que definitivamente me marcó un antes y un después. Hagánse un favor, y comprenlo, oíganlo, descarguenlo, poseanlo. CLICK AQUI.



¡¡¡¡Feliz 2010!!!! Gracias a todos mis lectores, posteadores y demás. Saludos al niño que caminaba dormido.

3 comentarios:

  1. Me es complicado opinar de este disco... Produce efectos distintos dependiendo de cuando y donde lo escuchas.

    Una recomendacion: Escuchar Sigur Rós mientras paseas en un invierno blaco y frio es MAGICO y es algo que deseo que todos experimenten una vez...

    En fin, este disco para mi es... deprimente, simplemente deprimente. Hasta la sprimeras 4 canciones me deprimen y estoy de acuerdo en que tienen una naturaleza tan bella. Pero siempre siento que es... Demasiado bello para ser verdad, demasiado bello para existir o para que yo merezca escuchar tales melodias. Despues de escuchar musica tan sucia... Esto simplemente me hace sentir inutil. Es un efecto muy raro, una "melancolia alegre" si es que eso tiene sentido.

    La musica es subjetiva, es lo mas bello de ese arte, ( ) No me ha impresionado al mismo nivel que tu, pero es realmente una de las mejores piezas musicales en mi coleccion.

    Se la recomiendo a cualquier que tenga el mas minimo gusto por musica, hay algunos discos que no importan si son Rock, pop, punk, jazz o metal... Tienen que ser escuchados por todos los que tengan el gusto por musica... Y ( ) es uno de esos discos.

    Feliz año nuevo a cada uno de ustedes... Inclusive a la tipa que jodio a Javier en la entrada de Twilight hahaha

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  2. ¿quien seria la tipa que escribio eso? me daria una risa absoluta si fuera hombre jajaja! xD no he escuchado a signor ross o como se escriba, voy a hacerlo sin duda, tienes un buen gusto musical xD eso lo compartimos muy bn! bueno me despido (ps me cago d la risa si fue la ladiz)

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  3. Hay alguna extraña razón por la que no puedo definir al ( ) con algo concreto, si lo hiciera, algo en mi cabeza explotaría o desaparecería. La fuerza de esta música es como algo sobrehumano, algo que excava hasta el alma de una persona, más allá de sus oídos o su mente. Me marcó, definitivamente me marcó.

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